Reflexiones sobre Frozen

Seré sincera, Frozen me decepcionó mucho cuando la vi. Me la pintaron como algo perfecto, mucho mejor que Enredados, y a mí me encantó enredados, así que tenía muchas expectativas y no se cumplieron, no es mala, pero no es lo que me esperaba. Así que me dediqué a verle los puntos malos sin darme cuenta de que enseña unos valores distintos a los que Disney ha enseñado desde siempre.

- El primero es que el primer amor no siempre es el ideal, el mejor, o con el que vamos a estar toda la vida. Y esto puede ser una gilipollez y que todo el mundo lo sabe, pero es necesario dejar el canon de toda la vida de Disney, en el primero es el definitivo. Porque Disney esta (y estará) sobretodo destinado a los niños, y estos aún son moldeables (ya vemos a la princesa Anna...) y tener 20 películas vistas en las que el primer hombre es el definitivo puede pasar factura a la larga.

- El segundo es que la palabra amor no es siempre en sentido romántico, ni el amor romántico es el lazo más fuerte. Aquí, en Frozen, la salvación la hace el amor fraternal, y eso es precioso. Y digno de mostrar a Y sacrificarse por ella fue un verdadero acto de amor verdadero (acá copian a Hércules).
los niños y niñas. Y hubiera sido muy fácil que Anna se hubiese enfadado con su hermana, pero la quería y amaba, y por eso siempre confió en ella.

- El tercero es que se necesita tiempo para conocer a la persona con la que vas a decidir pasar el resto de tu vida ( a pesar de que el divorcio ayuda mucho cuando te das cuenta del equívoco) y no es conocerlo y saber que vas a estar enamorada de él te puedes equivocar, te pueden engañar, no es una decisión fácil. La parodia que hace Frozen a los cinco minutos que dura el noviazgo me hizo resoplar varias veces. Pero me dolió que el triángulo romántico se rompiera porque uno de los dos era malo y no porque la princesa elija.

- Cuarto y último: una princesa que no necesita a un príncipe. Se necesitaba a Elsa desde hace mucho tiempo (a pesar de que me encanta la pareja que hace con Jack Frost <333). Elsa se encarga del reino cuando sus padres mueren y incluso después de que su hermana se case, completamente sola. Elsa se libera de la presión que supone esconder lo que realmente es y lo hace en soledad. Apoyarse en alguien no es malo, pero la dependencia emocional sí lo es y Elsa la tiene desde el momento en el que empieza a cantar Let it go (única canción en la película que me gustó).


Muchas de estas "innovaciones" es algo de sobra conocido, pero alguien tenía que empezar a llevarlo al cine y a los más jóvenes. Y aunque como trama a mí no me gustó, como película que rompe muchos clichés la respeto.