martes, 8 de abril de 2014
¿Privacidad?
El año pasado en filosofía, me encontré con una cosa muy curiosa; según Séneca la ira viene porque somos demasiado optimistas; es decir, esperamos demasiado de las personas y cuando no cumplen las expectativas nos enfadamos con ellos. Por eso desde ese momento intenté no hacerme ilusiones respecto a nada, así que no me voy a enfadar.
La cosa es que mis amigos han encontrado este blog (no iba a durar mucho de todas maneras) por lo que me he visto obligada a borrar dos entradas, una no es muy importante, pero la otra es mi querido flautista de Hamelín, y le tengo mucho cariño a esa entrada, así que no la eliminé del todo, volverá a estar operativa cuando me cambie el nombre y me mude a las Bahamas (just kidding).
Esto me ha llevado a replantearme hasta qué punto algo es privado, es obvio que este blog no es privado, está en Internet, cualquiera puede verlo, pero me hubiera gustado conservarlo intacto por parte de personas que veo cada día, porque esta iba a ser mi vía de escape, un lugar donde podría decir lo que quisiera, y ya no lo es.
No os equivoquéis, seguiré escribiendo, pero no publicaré cosas muy privadas, qué se yo, imaginaos que me enamoro, o que estoy haciendo un regalo, que me quiero meter con una persona que he hecho algo que no debería. No podría.
No me siento muy mal, porque si esto le pasara a un amigo mío buscaría el blog todos los días, así que coherencia cero.
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Cosas como esas suelen pasar siempre.
ResponderEliminarFuerza!
Que estés super. Saludos =D