Hoy venga con ganas de hacer una reflexión después de ver la película Cyberbully, sí, sobre el tema de la película, para que no se me pierdan.
La película en general está bien, pero aún sabe demasiado a cuento de Disney, pues el final es "feliz", para mi gusto tendría que haber muerto alguien (para mi gusto siempre tiene que morir alguien).
La pregunta que me he hecho a lo largo de la película es:
¿Dónde está el límite para la libertad de expresión?
La respuesta de la constitución española a esta pregunta es:
- Apología al terrorismo
- Apología a la xenofobia
- Injurias, calumnias y falsos testimonios
Otra pregunta a raíz de esto es ¿de verdad se puede hacer, o decir en este caso, lo que tu quieras escudándote en tu derecho de libertad de expresión?
Para mí el límite de la libertad de expresión es cuando se hace daño a alguien psicologicamente, por esto el límite varía ya que las personas pueden ser más o menos fuertes. No puedes intentar eludir tu responsabilidad poniendo como ejemplo otro caso en el que dicha parte no ponga queja; un ejemplo:
Supongamos que hay un acosador en el instituto, vale, se entiende, tiene a dos víctimas, trata igual (de mal) a ambas; pero una reacciona llorando y la otra aguanta.
Conclusión: no todas las personas son iguales, y antes de hacer cualquier cosa que puede dañar debemos pensar antes, y si aún así continuamos, ser consecuentes con nuestros actos.
Independientemente de ser diferente o igual sí que se debería hacer un esfuerzo para ser más asertivo, que te importe menos lo que digan los demás, porque si eres débil tienes dos opciones: madurar a base de ostias o deprimirte, y esto es así; te pueden ayudar, pero si estas solo o quieres superarlo solo es así.
Volviendo al tema de la película, hay muchos aspectos de Internet que no tendrían que ser así, pero por ello es el medio más libre de todos, y me gusta que sea así, aún con sus limitaciones.
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